El Juzgado de lo Penal N.º 3 de Barcelona ha condenado a Víctor R.M. a 2 años y 6 meses de prisión por un delito continuado de estafa. Víctor R. M. defraudó a un total de 11 taxistas mediante la contratación fraudulenta de pólizas de seguros. Además, deberá indemnizar a las víctimas con un total de 5.021,68 euros, más los intereses legales correspondientes.
“Esta sentencia es importante porque pone de manifiesto la gravedad de este tipo de estafas”, señala Javier Benito, letrado de Vosseler Abogados que representa los taxistas que han denunciado el fraude. Javier Benito remarca “las peligrosas consecuencias que suponen circular con un taxi sin seguro”.
El abogado Javier Benito también señala que “ha quedado de manifiesto el modus operandi del condenado, ya que había perpetrado el mismo tipo de estafa en Valencia, Salamanca y Madrid”.
OFERTAS ATRACTIVAS
Según los hechos probados en la sentencia, Víctor R. M. se hacía pasar por mediador de seguros y ofrecía pólizas con condiciones atractivas y precios reducidos a taxistas, quienes realizaban los pagos a sus cuentas bancarias. Sin embargo, en muchos casos, nunca llegó a contratar las pólizas o lo hizo en condiciones distintas a las acordadas, dejando a los afectados sin cobertura real.
El fallo del tribunal establece que el acusado actuó con ánimo de lucro y engañó a sus víctimas para obtener beneficios económicos ilícitos.
También la magistrada ha desestimado la alegación de la defensa sobre la existencia de cosa juzgada (non bis idem), en referencia a las condenas previas en Valencia, Salamanca y Madrid, argumentando la desconexión de unos con otros y por falta de identidad subjetiva entre las víctimas.
La condena también incluye la inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el cumplimiento de la pena y el pago de las costas del procedimiento. El acusado ha reconocido parte de los hechos y se ha mostrado dispuesto a devolver las cantidades defraudadas.